El uso rutinario comercial de drones pequeños fue autorizado el martes pasado por el Gobierno de Estados Unidos, luego de años de trabajo para redactar reglas que protejan la seguridad pública y den acceso a los beneficios de una nueva tecnología.
La Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) creó una nueva categoría de reglas para drones con un peso menor de 25 kilos (55 libras).
Las esperadas reglas significan que los operadores de esos drones podrán volarlos sin permiso especial.
Actualmente, los operadores comerciales tienen que solicitar una exención de reglas que gobiernan el uso de aeronaves tripuladas, un proceso costoso y demorado.
Desde 2014, la agencia ha aprobado más de 6 mil 100 exenciones y otras 7 mil 600 esperan aprobación. Muchas compañías pequeñas han estado usando drones sin permiso de la agencia, dicen funcionarios de la industria. A menos que los operadores de esos drones cometan un error grave que llame la atención de la agencia, no hay mucho que se pueda hacer para ubicarlos.
Las nuevas reglas proveerán una forma más fácil para que esos negocios operen legalmente.
Las reglas además despejan el camino para otros operadores potenciales que se han abstenido de usar la tecnología, como agentes de bienes raíces que quieren vistas aéreas de propiedades, ganaderos que quieren contar ganado y varios negocios más.
Bajo las nuevas reglas, los operadores deben registrar sus drones por internet y aprobar un examen de conocimientos de aviación para pilotos de drones en un centro aprobado por la FAA. Eso les daría un certificado válido por 24 meses.
Eso representa un gran cambio, ya que los operadores actuales tienen que tener licencia de piloto de avión.
Los operadores además deberán presentar identificación para una revisión de seguridad similar a la aplicada a los pilotos de aviación general.
Los operadores tendrán también que seguir muchas de las reglas aplicables a los aficionados del aeromodelismo, como mantener contacto visual con los drones en todo momento y no volar sobre personas ni a una altura mayor de 120 metros (400 pies).
