El Grupo Tata, con unos beneficios anuales equivalentes al 3% del producto interior bruto (PIB) de la India, está decidido a continuar sus hazañas en el extranjero, donde ya genera el 25% de sus ganancias.
El imperio Tata, nacido en 1870 cuando Jamsetji Tata compró un taller textil, es uno de varios grupos empresariales que han guiado a la India en su camino hacia la modernidad y mira ahora hacia el extranjero para continuar su expansión.
Este conglomerado empresarial familiar, que genera unos beneficios anuales cercanos a los 17 mil 800 millones de dólares, es hoy en día uno de los mayores y más respetados del país.
En la India, la marca Tata es sinónimo de éxito y de poder, por lo que cerca de tres millones de accionistas apoyan a las 32 empresas del grupo que cotizan en bolsa.
Está compuesto en total por 93 empresas que operan en siete sectores de negocio: sistemas de información y comunicaciones, ingeniería, materiales, servicios, energía, productos de consumo y químicos.
Entre sus compañías clave figuran Tata Consultancy Services, la mayor empresa de software de Asia; Tata Tea, la mayor productora de té del mundo; Tata Steel, el segundo mayor productor de acero de la India, y Tata Motors, líder en ventas de vehículos pesados en el país y una de las primeras en ventas de utilitarios.
La capitalización del grupo es de 46 mil 100 millones de dólares, la mayor del país, y los beneficios de sus empresas se duplicaron en los últimos cuatro años hasta alcanzar los más de 22 mil millones de dólares.
Este gigante ha sido uno de los principales empujes del desarrollo de la India, un país que tras un siglo de colonización británica se limitaba a exportar materias primas y dependía del exterior para proveerse de productos con valor añadido.
Los Tata construyeron en 1903 en Bombay el primer hotel de lujo de la India, el impresionante Taj Mahal.
Tres décadas más tarde abrieron el sector de la aviación en el país con la puesta en marcha de Tata Airlines y en 1998 lanzaron al mercado el primer coche diseñado y fabricado íntegramente en la India, el Tata Indica, que es hoy uno de los modelos más vendidos.