Stefy Cohen*
OPINIÓN
No fue hasta cuando empecé a trabajar que le presté atención a la frase: “En la lucha”. Igual como cuando una pequeña cortada en la mano te hace estar pendiente de tu mano todo el día, empecé a escuchar la frase en todas partes. Noté como “Aquí, en la lucha” era una respuesta común para contestar preguntas como: ¿Cómo estás? ¿Cómo va el trabajo? ¿Cómo va el negocio? y ¿Cómo va la vida? Pronto, yo también usaba la frase buscando empatía o identificación con las otras personas. Sin embargo, rápidamente caí en cuenta cómo usar esta frase me hacía sentir como que estaba menos en un campo de batalla donde estaba siendo estratégica y más como si estuviera en una guerra sangrienta, en el bando perdedor, viendo como caían mis compañeros uno a uno.
Mi preocupación con las palabras tiene que ver con cómo las palabras que escogemos tienen un impacto en cómo pensamos, cómo nos sentimos y cómo tomamos acción. Por una parte, creo que la frase “en la lucha” realmente describe un sentimiento de frustración de habernos esforzado y no obtener resultados a cambio. Por otra parte, y esta es la parte importante, creo que la frase “en la lucha” es un estado mental que conspira en contra de ganar esa lucha. Por eso quisiera proponer que reemplacemos “la lucha” por el hustle, en vocabulario, actitud y práctica.
Hustle es una palabra anteriormente asociada con el mundo del rap y la maleantería. Famosos raperos como Snoop Dog, Jay-Z y Rick Ross hablan del hustle en un mundo de drogas, apuestas y prostitución. En ese mundo, el hustler es un juega vivo. Es una persona que hace lo que tenga que hacer, legal o ilegalmente, para conseguir dinero y sobrevivir la lucha.
Sin embargo, las definiciones de las palabras están sujetas a cambios dependiendo de su uso contextual. Desde hace un tiempo, en el mundo de los startups y el emprendimiento se adoptó la palabra hustle para referirse al estilo de vida del emprendedor que activamente busca el éxito.
Ahora, el hustler es un juega serio. Es una persona que hace lo que tenga que hacer para lograr sus metas y crear impacto a gran escala. Aunque la palabra hustle subió de categoría en el vocabulario coloquial, no perdió totalmente la particularidad de cool de las canciones de rap. Entonces, la diferencia entre el hustle y “la lucha” es que la lucha se trata acerca de bregar para subsistir y el hustle se trata acerca de resolver positivamente hasta hacerla en grande.
Muchas personas aniquilan sus propios deseos de emprender preguntándose: ¿Quién soy yo para: empezar mi propio negocio, escribir un libro, empezar un proyecto? Emprender, de muchas maneras, es entender que no se necesita permiso para salir a la calle y buscar cómo crear tu nombre, tu marca y tu espacio.
El hustle es la persistencia y la insistencia para lograrlo. El hustle no es solamente trabajar duro, es trabajar inteligentemente. Hustle es estar en constante movimiento, propulsado por tu misión.
Paul Graham, el fundador de Y-Combinator (una famosa aceleradora de empresas de Silicon Valley), describe precisamente el hustle en acción. Algunos emprendedores fundan o lanzan sus compañías y esperan que los clientes lleguen a ellos por arte de magia o de marketing. Pero los verdaderos hustlers, como los emprendedores detrás de compañías como Stripe o AirBnB salieron físicamente a buscar clientes y pedirles que probaran sus aplicaciones ahí, en ese momento, en sus computadoras. Así es cómo se ve el hustle.
El emprendedor que busca ser exitoso tiene que ser un hustler. Tiene que ser persistentemente recursivo e insistentemente proactivo. Este es un llamado de acción y una invitación a hustle. Que la lucha sea menos un lugar del que no podemos escapar y más la ferocidad con la que trabajamos hacia lograr nuestras metas. Con el estilo cool del rap y la determinación de los negocios cántate a ti mismo: Everyday I’m hustlin. Y sal a hacerlo.
PD: Te invito a www.facebook.com/stefycohenb a que subas tu foto y tu definición del hustle. El hustler que más likes consiga en su post se ganará una reunión con tres potenciales inversionistas para presentarles su idea de negocios y seguir hustling.
