China presentó ayer su primer avión de pasajeros de larga distancia, el C919, de diseño y fabricación nacionales, que aspira a competir en la próxima década con modelos similares de Airbus y Boeing.
La Corporación de Aeronaves Comerciales de China (Comac, un conglomerado estatal) mostró en Shanghái su primer aparato ensamblado y listo para los ensayos de tierra, con el primer vuelo de pruebas previsto para el año próximo.
A pesar de los numerosos retrasos que ha sufrido el proyecto los últimos años y de que se temía que su vuelo inaugural pudiese retrasarse hasta 2017, ahora se asegura que las primeras pruebas en el aire del aparato, cuya presentación se está siguiendo con gran despliegue en los medios chinos, serán en 2016.

