PEKIN, China (EFE). La renta per cápita de los campesinos chinos, colectivo que representa a más del 80% de una población aproximada de mil 280 millones de habitantes, creció un 4% en 2001, con lo que se invirtió la tendencia a la baja iniciada en 1998, informaron ayer las autoridades económicas.
Según estadísticas de finales de 1998, la renta per cápita anual de un campesino chino era de unos 246 dólares, mientras que la de un ciudadano urbano oscilaba en torno a los 623 dólares.
Esta mejora se debe a un incremento en los precios de los productos agrarios, especialmente cereales, y al desarrollo de la ganadería, informó el ministro de Agricultura, Du Qinglin.
Du reconoció que los agricultores chinos todavía carecen de los medios para salir adelante y que continúan los obstáculos tradicionales que impiden el desarrollo del campo.
El ministro de Agricultura admitió que una de las razones del incremento de la renta per cápita de los campesinos es la movilidad social. Uno de los graves problemas que afecta a la China rural es la explotación de los campesinos por los caciques locales, que imponen impuestos abusivos a los agricultores a pesar de que el Gobierno de Pekín les ha aconsejado que liberen las cargas de la gente del campo.
