Presidentes sudamericanos dieron ayer el lunes pleno respaldo político a la construcción de un gasoducto para asegurar el abastecimiento de gas a toda la región, preocupada por la inestabilidad en la convulsionada Bolivia, principal productor y exportador regional del fluido.
La reunión de Asunción sirvió también para que el Mercosur lance negociaciones para un pacto comercial con Panamá e Israel y coordinar acciones conjuntas para erradicar en los próximos cuatro años la fiebre aftosa, una enfermedad altamente contagiosa y castigada en los mercados mundiales de la carne, de la que el bloque es fuerte productor.
El vicepresidente y canciller Samuel Lewis Navarro viajó a la cumbre para "iniciar las exploraciones de lo que pueda ser un acuerdo comercial con el Mercosur" con oportunidades de desarrollo para Panamá, paso previo para ingresar al bloque como país asociado.
