Donald Stout, cofundador de la empresa estadounidense NTP que emite licencias para patentes de su propiedad, está en el centro de una batalla que determinará si más de dos millones de personas en Estados Unidos podrán seguir utilizando un producto que es tanto un símbolo de estatus como lo es adictivo– el aparato de correos electrónicos Blackberry de Research In Motion Ltd. (RIM).
En una disputa sobre violación de patentes, NTP Inc.–que no fabrica productos y no tiene empleados– está a solo un fallo judicial de obligar a que las pantallas de Blackberry se vuelvan oscuras para siempre. La posibilidad tiene alarmados a los usuarios.
Para cubrir los honorarios hasta el vencimiento de las patentes en 2012, Stout ha pedido la suma de mil millones de dólares, más del doble de los 450 millones de dólares propuestos por RIM en junio de este año.
La Oficina de Patentes de Estados Unidos presentó ayer un rechazo "no definitivo" de una segunda patente de NTP, objeto de la pugna judicial contra RIM. Sin embargo, el fallo no ayudará a RIM ya que una corte de apelaciones ha declarado en dos ocasiones que las patentes de NTP fueron violadas, incluyendo una que recibió un rechazo no definitivo anteriormente.