La dirección de Salud Animal de Nicaragua notificó ayer oficialmente al Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) que ha suspendido temporalmente sus importaciones de pollo procedentes de Panamá, específicamente de las compañías Toledano y Melo. Sin embargo, las autoridades de Nicaragua no aclararon si mantendrán la restricción al ganado en pie de Panamá.
El Ministro de Desarrollo Agropecuario, Laurentino Cortizo, señaló ayer que el problema del pollo se debe principalmente a la certificación de las plantas por parte de Nicaragua. La notificación contradice las declaraciones del Ministro Agropecuario y Forestal de Nicaragua, Augusto Navarro, quien ayer en la mañana negó que se haya decretado el cierre de frontera para estos productos.
Lo cierto es que desde ayer, tanto Melo como Toledano no podían exportar productos a Nicaragua, un mercado que representa más de 3 millones de dólares anuales en ventas para estas empresas.
La restricción interrumpe la cadena de comercialización de Melo en Centroamérica donde la empresa abastece a cadenas de restaurantes internacionales como McDonald’s. Asimismo, el jefe de Salud Animal de Nicaragua, Omar García, informó ayer a su contraparte en Panamá que el país estará respondiendo este lunes al cuestionario de Panamá con miras a certificar que es un país sin riesgo de la enfermedad de las Vacas Locas. Cortizo señaló que su administración ha buscado resolver este problema a la mayor brevedad posible pero requiere cierta documentación que aún está por llegar.
