TOKIO, Japón. (EFE) La empresa Nissan Construction, cuyo accionista mayoritario es la fallida cadena de supermercados Mycal, anunció ayer que pidió protección legal de sus acreedores y dejará un pasivo de 114 mil 600 millones de yenes (unos 851 millones de dólares).
La quiebra es la segunda de una constructora integrada en la bolsa de Tokio este año, tras Sato Kogyo a comienzos de marzo, y la décimosegunda que se registra entre las firmas que cotizan en el primer mercado bursátil japonés.
Según la empresa, los problemas surgieron tras la dificultad en cobrar las deudas por trabajos terminados para el grupo Mycal, propietario del 48% de sus acciones, y que en septiembre pasado se declaró en quiebra.
Tras la bancarrota de Mycal, el nivel de negocios se redujo y en consecuencia Nissan Construction prevé pérdidas netas consolidadas de 24 mil 600 millones de yenes (unos 183 millones de dólares) para el año fiscal 2001, que terminó ayer, dijeron las mismas fuentes.
Nissan Construction fue fundada en 1946, a partir del mismo grupo que dio origen a Nissan Motor y al fabricante de productos de electrónica Hitachi.
El minorista Nichii, que más tarde cambió su nombre a Mycal, se convirtió en 1988 en el accionista mayoritario y hasta septiembre pasado su participación se elevaba al 48.1%.
El sector de la construcción nipón, uno de los más protegidos por intereses políticos, está afectado por la fuerte reducción en obras públicas y los expertos aseguran que las quiebras ponen en evidencia la reticencia de los bancos a auxiliar empresas en apuros.
Los analistas aseguran que el retroceso del sector de la construcción provocará un efecto en cadena en la economía.