Los explosivos que se utilizarán eventualmente en los trabajos de ampliación del Canal, en caso de ser aprobado el proyecto en el referéndum, se guardarán en los nuevos depósitos de artillería ubicados en el área de Horoko, Rodman.
Se trata de 14 búnkeres que utilizaban los estadounidenses como centros para guardar la artillería militar y que fueron cedidos como depósitos de explosivos por la desaparecida Autoridad de la Región Interoceánica (ARI).
Instalación segura
También hay cuatro locales ubicados en la entrada de Horoko que están en proceso de traspaso y que se podrían utilizar como área administrativa para la custodia e inventario de esos materiales, dijo el coronel Luis Rodríguez, encargado de Explosivos del Consejo de Directores de Zonas del Cuerpo de Bomberos de Panamá, entidad responsable de la custodia e inventario de estos explosivos para proyectos de construcción.
Actualmente, los explosivos que se utilizan en los trabajos de ensanche del corte Culebra y de cualquier otro trabajo de voladura que se realice en el país, se guardan en los depósitos ubicados en Cativá.
La decisión de cambiar el área para Horoko obedece a que las instalaciones de Cativá están muy deterioradas, dijo Rodríguez.
Los explosivos militares que se utilizan para protección y seguridad de la población están en manos de la Policía Nacional y estos se guardan en un depósito de la institución.
Las nuevas instalaciones son más seguras y solo requieren la reparación de una de las puertas.
Debido a que esas instalaciones no se utilizan desde hace muchos años, se requiere mejorar los caminos de acceso, trabajo que realizará el Ministerio de Obras Públicas, dijo de Rodríguez.
Menos riesgo
Antes de 1990 se usaba la dinamita para llevar a cabo trabajos de voladura de roca, pero actualmente se utiliza amfo, una mezcla de nitrato de amonio con diésel.
Según Rodríguez, que tiene 50 años de manejar el tema de los explosivos en el Cuerpo de Bomberos, este tipo de explosivo es mucho más seguro porque su incineración solo es posible con descargas eléctricas, mientras que la pólvora –utilizada para la construcción del Canal– arde con cualquier chispa de fuego.
Las barras de explosivos se colocan en las perforaciones sobre la superficie. Los nuevos explosivos preparados con amfo son más seguros y eficientes, según dijo Rodríguez.
UN PASO SOBRE LAS ROCAS
CANAL: La construcción del Canal utilizó aproximadamente 67 millones de libras de dinamita.
AMPLIACIÓN: La cantidad de explosivos que se necesitaría para la construcción del tercer carril dependerá de la roca que haya en el área del proyecto.
CUSTODIA: El Consejo de Directores de Bomberos recibe 80 dólares por cada entrega de explosivos de los depósitos de Cativá.

