La empresa estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) inauguró ayer sus oficinas en un nuevo paso de cooperación e integración con la refinadora estatal de Uruguay ANCAP, que será ampliada con una inversión de 600 millones de dólares.
Asimismo, se inauguraron las oficinas del Banco Nacional de Desarrollo Social (Bandes) en el corazón de la llamada Ciudad Vieja, que impulsarán proyectos conjuntos.
El acto fue encabezado por la embajadora venezolana María Urbaneja, ya que el presidente Hugo Chávez interrumpió su agenda prevista, explicándose que era para descansar y permaneció en su hotel.
Chávez, inicialmente, también iba a ir a la empresa de neumáticos FUNSA que está bajo gestión obrera.
Urbaneja resaltó los propósitos de cooperación con Uruguay como un paso más en la integración y consolidación de los países sudamericanos.
El ministro de industria y energía de Uruguay, Jorge Lepra, dijo que "sin duda hoy es un día lleno de simbolismos y los simbolismos con muy importantes.
Hemos firmado con PDVSA acuerdos que van a ayudar muchísimo al desarrollo de ANCAP y, como hemos dicho más de una vez, ANCAP necesita espaldas fuertes".
Agregó que "con esos acuerdos vamos a acceder a explorar un bloque en la plataforma del Orinoco, y se firma también un acuerdo con una empresa francesa para la ampliación de la ingeniería de la red de la refinería y nos permite acelerar la solución a las estaciones de servicio que ANCAP tiene en Argentina".
No brindó detalles, pero se ha venido informando de cuantiosas pérdidas mensuales para ANCAP en esas estaciones de venta de gasolina.

