La economía de Japón habría anotado su segunda mejor racha de crecimiento de la posguerra, mostró ayer un índice gubernamental de agosto, gracias a la sólida demanda global y a las agresivas medidas de estímulos del primer ministro nipón, Shinzo Abe.
La más reciente lectura es conocida en momentos en que Abe se encamina a una elección general este mes y pone en el foco a sus políticas económicas, conocidas como “Abenomics”.
Sin embargo, pese a la sólida cifra, analistas afirman que los beneficios del crecimiento no han logrado llegar a sectores más amplios de la economía.
El índice de indicadores económicos coincidentes subió en una lectura preliminar en 1.9 puntos, a 117.6, en agosto en comparación al mes previo, y a un nivel visto por última vez en marzo de 2014, dijo la Oficina del Gabinete.
Eso marcaría 57 meses consecutivos de crecimiento, la segunda mejor racha de expansión desde la Segunda Guerra Mundial. La anterior racha de crecimiento tuvo lugar entre 1965 y 1970.
El índice coincidente es usado para medir el estado de la economía y figura entre los indicadores que usa el gobierno para determinar si la economía se está expandiendo o está en recesión. Incluye varias lecturas, como la producción fabril, el empleo y las ventas minoristas.
De acuerdo con el gobierno, la economía japonesa ha estado en expansión desde diciembre de 2012, cuando Abe asumió su mandato.
Se expandió a una tasa anualizada de 2.5% en el segundo trimestre por el repunte del gasto del consumidor y de las empresas, y es probable que el crecimiento estable se mantenga en los próximos trimestre.
La tasa de desempleo, que era de 4.3% cuando Abe asumió su mandato, bajó a 2.8% en agosto.

