El crecimiento del producto interno bruto de Rusia (PIB) se desaceleró sustancialmente en el tercer trimestre, dejando al país más alejado de otras importantes economías emergentes.
Golpeado por una severa sequía en el verano boreal, que destruyó las cosechas y reprimió la actividad económica, el PIB ruso se expandió un 2.7% en una base anual en el periodo julio-septiembre, mostraron cifras preliminares del Servicio de Estadísticas Federal.
Aunque la economía creció por tercer trimestre consecutivo, la expansión fue casi la mitad del 5.2 visto en el segundo trimestre. Sin embargo, superó el último pronóstico formal del Ministerio de Economía de un avance del 2.2%.
La oficina de estadísticas no publicó una estimación sobre el crecimiento frente al segundo trimestre. “(...) basado en la desaceleración de la tasa anual, pensamos que probablemente la economía se contrajo algo como un 0.6% en una base trimestral en el tercer trimestre”, comentó en una nota a los clientes Neil Shearing, economista de mercados emergentes de Capital Economics en Londres.
“La brusca caída en el crecimiento del PIB ruso (...) está en un marcado contraste con el generalmente fuerte grupo de información publicado en otras partes de la región y deja a Rusia fuera del resto de los países del BRIC, dijo Shearing, refiriéndose a Brasil, India y China. Las economías de Eslovaquia, y Hungría superaron los pronósticos de crecimiento de los analistas para julio-septiembre. Sin embargo, la desaceleración no tomó por sorpresa a los economistas, porque la peor sequía registrada en décadas destruyó un tercio de los cultivos.