GINEBRA, Suiza (EFE). El Producto Interno Bruto suizo creció el pasado año un 0.9%, con lo que el debilitamiento de la coyuntura fue superior a lo calculado inicialmente.
Los primeros cálculos situaban en un 1.3% el crecimiento del PIB a precios constantes, cifras que la Oficina Federal de Estadísticas (OFS) ha revisado ayer a la baja.
A precios constantes, es decir, corregido el factor inflación sobre la base del año 1990, el Producto Interno Bruto suizo fue el año pasado de 349,000 millones de francos (232,700 millones de dólares al cambio actual).
Sin tener en cuenta la inflación, el crecimiento fue, sin embargo, de un 2.3% con respecto al año 2000 y el Producto Interno Bruto alcanzó 415.000 millones de francos (276,700 millones de dólares).
Sacudida por la caída bursátil, la plaza financiera helvética influyó negativamente en la coyuntura, explica la OFS, según la cual sin la caída de los ingresos por comisiones de los bancos y de las sociedades financieras, el Producto Interno Bruto habría crecido más.
Otro factor negativo fue la caída de la actividad de las compañías de seguros, otro importante sector de la economía suiza, también muy estrechamente conectado a las Bolsas.
El comercio, tanto mayorista como minorista, los transportes con excepción del aéreo, el sector inmobiliario y las telecomunicaciones obtuvieron buenos resultados, pero los productores de bienes industriales se resintieron de la crisis.
Los datos estadísticos indican que la principal afectada fue la industria de la maquinaria y de los bienes de equipo aunque también sufrieron el impacto las empresas de confección textil.
Los atentados terroristas del 11 de septiembre en Estados Unidos no tuvieron más que un impacto ligero en los consumidores, según la Oficina de Estadísticas, que agrega, sin embargo, que ésos redujeron sus compras de productos no perecederos como muebles y ordenadores.
Los suizos gastaron también algo menos que el año anterior en ocio, espectáculos y enseñanza, aunque los gastos en salud aumentaron fuertemente.
Por lo que respecta a las inversiones, se registró una caída del 1.8% en la construcción y de un 5.2% en bienes de equipo.
