El proyecto experimental de papa tropicalizada en Las Minas de Herrera empieza a dar frutos.
Los 11 primeros clones de papa tropicalizada que se sembraron en el Ciprian de Las Minas lograron adaptarse a las condiciones climáticas de la región, manifestó Arnulfo Gutiérrez, investigador del Instituto de Investigación Agropecuaria de Panamá (Idiap).
En la primera etapa se sembraron los clones de papa 110, 145 y 102. “Las variedades en este estudio se identifican con códigos que al momento de su recomendación se les asignará su nombre, informó el funcionario.
Las primeras vitro plantas de la papa tropicalizada se importaron del Centro Internacional de la Papa en Perú en tubos de ensayo, y se reprodujeron en el Laboratorio de Agrobiotecnología del Idiap, ubicado en Divisa.
En una segunda etapa se medirán los rendimientos de estos clones para su posterior liberación.
La papa tropicalizada se caracteriza por su alta resistencia a temperaturas superiores a 25 grados centígrados, y se puede cultivar a 500 metros de altura.
También destaca su resistencia al ataque de enfermedades como el tizón tardío (phitophthora infestans), asegura el investigador del Idiap.
“El tizón tardío es un hongo que penetra la hoja de la planta, le absorbe sus nutrientes y puede acabar con los cultivos en una semana”, comentó Gutiérrez.
El cultivo de papa en el país se concentra en las tierras altas de la provincia de Chiriquí, donde 153 productores siembran 777 hectáreas del tubérculo.