El impresionante aumento de la popularidad de Pokémon Go ha dejado confundidos a los analistas que cubren Nintendo Co. para los bancos de inversión más grandes del mundo.
Tomemos el ejemplo de Hiroyasu Eguchi de Bank of America Corp., quien rebajó la calificación de la acción de Nintendo en abril y disminuyó su precio objetivo el 6 de julio, un día antes del debut de Pokémon Go en Estados Unidos y que las acciones comenzaran a repuntar a más del doble de su precio durante dos semanas.
Eguchi revirtió el rumbo esta semana: el lunes mejoró la calificación de la acción a “comprar” y estableció su precio objetivo a un nivel que casi duplica el actual. Eguchi no es el único que se está poniendo al día. Una semana antes de la salida de Pokémon Go, Hirotoshi Murakami de Mitsubishi UFJ Morgan Stanley Securities Co. rebajó su precio objetivo de Nintendo a su menor nivel desde abril de 2015.
Después de que las acciones se dispararon, Murakami se retractó y ahora espera que las acciones se eleven un 71% desde el cierre del martes. Es difícil culpar a los analistas por ser tomados por sorpresa.
El debut del revolucionario juego sorprendió prácticamente a todos –incluidos los periodistas financieros– y la comunicación de Nintendo no ha ayudado.
La empresa con sede en Kioto se mantuvo en silencio durante más de dos semanas, mientras el lanzamiento del juego sumaba $20 mil millones a su valor de mercado.
Luego, en un sorprendente anuncio, la empresa informó que el impacto en las ganancias por motivo del juego será limitado. La cotización de las acciones cayó a su menor nivel en 26 años.
Esto demuestra que no existe suficiente disciplina en el mercado japonés en cuanto a lo que puedes decir, cuándo puedes decirlo y cómo debes decirlo equitativamente para todos”, dijo Nicholas Benes, director representante del Board Director Training Institute de Japón.

