En base al acuerdo, P&G podrá dar instrucciones al consejo de administración de la compañía alemana y, además, recibirá sus beneficios anuales. El grupo estadounidense mantiene el 99.6% del capital de base de Wella, compañía líder en el sector cosmético en Alemania.
Según un comunicado, el tratado de dominio y transferencia de beneficios fue inscrito en el registro mercantil de Darmstadt, por lo que entró en vigor con efecto inmediato. La medida había sido aprobada por la asamblea de la compañía el pasado 8 de junio.
Tal como marcan las leyes alemanas, P&G pagará a los accionistas ajenos al grupo una indemnización del 72.86 euros (87.53 dólares) por título, con el fin de que abandonen la compañía en el marco de una operación de expulsión o "squeeze out".
Asociaciones de inversores consideraron sin embargo que dicha cantidad es demasiado reducida y acusaron a P&G de tratar de manera diferenciada a los diferentes grupos de inversores. Por ello, la sociedad alemana para la defensa del pequeño accionista SdK anunció acciones judiciales.
P&G había pagado 92.25 euros (110.81 dólares) por cada una de las acciones ordinarias con derecho a voto, mayoritariamente en manos de la familia fundadora de Wella. Sin embargo, por las acciones preferenciales solo ofreció 65 euros (78 dólares) por unidad.