La empresa Graco Childrens Products, especializada en la fabricación de productos infantiles, ha comenzado la retirada voluntaria de dos millones de coches de bebé tras la muerte de cuatro niños en Estados Unidos.
La Comisión para la Seguridad del Producto para el Consumo informó ayer de que la retirada afecta a dos modelos en concreto, los llamados Quattro y MetroLite, que son los que presuntamente están involucrados en la muerte por estrangulamiento de cuatro niños entre 2003 y 2005.
Aparentemente, cuando los niños menores de un año no son atados correctamente a la silla, pueden deslizarse de manera que su cabeza quede atrapada entre la bandeja y el asiento del cochecito, con el consiguiente riesgo de estrangulamiento. Además de las cuatro muertes, la agencia del consumidor ha recibido notificaciones de otros incidentes.

