La industria automotriz de Argentina seguirá golpeada en 2017 por la menor demanda en Brasil, el mayor socio comercial del país, pero la producción de vehículos crecería levemente tras cerrar este año con una caída que se prevé del 8% interanual, dijo el presidente de Fiat Chrysler Automobiles (FCA) en Argentina.
Cristiano Rattazzi sostuvo que pese a las reformas promercado en el país sudamericano, la recesión de Brasil seguirá perjudicando las exportaciones y la producción local de vehículos, que en septiembre se hundió cerca del 20% interanual.
“Soy optimista con el futuro, aparecen brotes verdes en muchos sectores de Argentina.
El año 2017 será discreto, nada especial para las automotrices, en particular porque vamos a sufrir con las exportaciones al mercado de Brasil”, dijo en una entrevista.
Las automotrices argentinas produjeron 543 mil 467 vehículos en 2015 y las exportaciones se hundieron el 31.3% interanual, según datos de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa), lo que llevó al gobierno de Mauricio Macri a eliminar los impuestos a las exportaciones de autos.
“La producción terminará el año algo por debajo de las 500 mil unidades, pero la perspectiva es superar este número en 2017, aunque dependerá mucho de Brasil”, dijo Rattazzi durante el coloquio anual del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA).
Alrededor de la mitad de los vehículos livianos producidos en Argentina tiene como destino el vecino Brasil.
El ejecutivo, de origen italiano y radicado en Argentina desde hace varios años, dijo que el país debe buscar colocar sus exportaciones en otros mercados, y señaló que un eventual acuerdo entre el bloque regional Mercosur y la Unión Europea (UE) sería un aliciente clave para el sector.
“Debemos bregar por plazas como México y Europa. México está abierta, el problema es nuestra competitividad. La apertura de Europa es una decisión del Gobierno y esperemos que avance con ello”, señaló.
Las actuales conversaciones sobre libre comercio entre la UE y el Mercosur podrían dar paso a un acuerdo dentro de dos años, dijo el secretario de Comercio de Argentina, Miguel Braun, en una señal positiva sobre las relaciones de negocios entre el bloque y Buenos Aires.
El gobierno de centro derecha de Macri, que asumió en diciembre, está aplicando un ajuste económico para bajar la alta inflación que Argentina sufre desde hace años.
La dura situación económica ha llevado a despidos y suspensiones de personal en automotrices este año.
“La inflación es el mayor corruptor del país y un verdadero desastre para los pobres. El 30% de pobres (que tiene Argentina) lo creó la inflación, por eso aplaudo las políticas para lograr bajarla”, dijo Rattazzi.
