La semilla de la dulce y jugosa piña panameña tiene problemas de plagas, y al momento no se conoce una estrategia para combatir el problema.
Aunque la cotizada fruta en el extranjero nunca se ha afectado por esto, el asunto merma las posibilidades de exportar la semilla por incumplimientos sanitarios, además de bajar los rendimientos de los cultivos.
En julio pasado autoridades sanitarias cubanas visitaron varios piñeros panameños para gestar un nuevo negocio. Buscaban un proveedor de 10 millones de semillas de la variedad MD2, pero el análisis arrojó la presencia de plagas y cancelaron la misión. A cambio hicieron recomendaciones a las autoridades locales para eliminar el virus.
Se identificaron seis fincas con potencial para exportar, siempre que cumplan con el programa sanitario y eliminen las plagas, pero según las autoridades solo una se ha interesado en exportar hijuelos de piña y ha implementado un plan para combatir la plaga.
“Claro que hay problema de plaga con todos los cultivos, pero esto se puede resolver con un programa”, dijo Dario Gordón, de Sanidad Vegetal del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (Mida).
El plan de manejo de la semilla se realizará con los productores interesados en exportar.
“Aquí en Panamá no hay un programa de cultivo de semillas”, indicó Ismael Camargo, encargado de mejoramiento genético del Instituto de Investigación Agropecuaria de Panamá. Se requiere un programa para obtener semillas libres de virus aplicando biotecnología, mencionó.
El cultivo es altamente rentable por lo que sugirió a los productores trabajar en el problema.
Ricardo García, de la Corporación Frutera del Pacífico, propietario de una de las parcelas inspeccionadas, indicó que trabajan en conjunto con las autoridades del Mida en el “protocolo cubano” para lograr la exportación.
Panamá nunca ha exportado semillas de piña, por lo que esta pudiese ser una oportunidad.

