El gigante electrónico y de ingeniería alemán Siemens obtuvo cifras positivas en facturación y beneficios, a pesar de la crisis que la sacude con la renuncia del presidente de la empresa, Klaus Kleinfeld, y del titular del consejo de vigilancia, Heinrich von Pierer, en menos de una semana.
En el segundo trimestre del año fiscal 2006/07, que finalizará el 30 de septiembre, todos los segmentos del conglomerado alcanzaron por primera vez los altos réditos pronosticados. "Con estos, estamos en condiciones de crecer más que la economía, alcanzando mayores niveles de rentabilidad", dijo Kleinfeld al comentar las cifras.
El beneficio neto creció en un 36%, alcanzando los mil 710 millones de dólares. La facturación creció un10%, hasta los 28 mil millones de dólares. Todos los segmentos del gigante terminaron con ganancias.
El resultado operativo del grupo aumentó en un 49%, hasta casi 2 mil 732 millones de dólares.
Kleinfeld había anunciado por sorpresa que no iba a seguir al frente de Siemens más allá de septiembre de este año, cuando finaliza su contrato, reaccionando de esta manera a rumores de que el Consejo de Vigilancia estaba buscando ya a un sucesor.