La decisión del multimillonario mexicano Carlos Slim de vender acciones en su división de construcción refuerza su apuesta al potencial de ganar construyendo caminos, plataformas petroleras y otros proyectos de infraestructura en Latinoamérica, dijo su hijo mayor. Carso Infraestructura y Construcción SA, división de Grupo Carso SA de la Ciudad de México, recaudó 4 mil 700 millones de pesos (433 millones de dólares) en una oferta pública inicial de 26% de su capital la semana pasada. Las acciones subieron 5% en el primer día de operación el 21 de octubre. Unos 4 mil inversionistas compraron las acciones, dijo la Bolsa Mexicana de Valores.
"Las oportunidades en el sector de la construcción, especialmente el desarrollo de infraestructura, serán muy importantes", dijo Carlos Slim Domit, presidente de Grupo Carso, en una entrevista en la Ciudad de México. "Tener a la empresa con un enfoque muy dirigido, muy estructurado, con una personalidad propia es muy importante".
Los ingresos de Cicsa aumentaron a más del doble en los últimos dos años, a unos 920 millones de dólares anuales, porque la compañía instaló redes de telecomunicaciones para Teléfonos de México SA y América Móvil SA, operadores controlados por Slim. El multimillonario de 65 años de edad ahora planea usar Cicsa para ganar con el alza en el gasto en infraestructura, la fuente de ingresos de más rápido crecimiento de la compañía.
Las ventas en este sector, que incluye proyectos de electricidad, carreteras y agua, se triplicaron a 155 millones de dólares en el primer semestre de 2005, según el prospecto de oferta pública inicial de la compañía.
Tan solo el Gobierno de México planea presentar ofertas por contratos por un valor de hasta 3 mil 685 millones de dólares para fines de 2005.

