El gigante japonés del motor, Toyota, ha tendido la mano a su rival estadounidense en crisis, General Motors, ante el temor de que su imparable expansión reavive tensiones comerciales en EU.
Los presidentes de los dos colosos mundiales del automóvil, el japonés Fujio Cho y el estadounidense, Richard Wagoner, se reunieron este fin de semana en Aichi, provincia que en estos momentos acoge la Exposición Universal y donde Toyota tiene su sede.
Según el diario Yomiuri los dos directivos trataron sobre la posibilidad de profundizar en la investigación conjunta de vehículos más ecológicos, como los dotados con una celda de combustible, un sistema que usa el hidrógeno y el oxígeno para generar electricidad.
El rotativo de mayor tirada en el país aludió incluso al sistema híbrido que combina un motor eléctrico y otro de gasolina y que Toyota ha incorporado con éxito a varios de sus modelos.
Los analistas en Japón coinciden en que la voluntad de cooperación mostrada por Toyota refleja su inquietud por sus resultados arrolladores en EU, cuya compañía bandera y primera del mundo, por contra, sufre serias dificultades.
Toyota anunció un beneficio neto récord por tercer año fiscal consecutivo, al alcanzar 1.17 billones de yenes (10 mil 934 millones de dólares), tras aumentar sus ventas en EU en 168 mil unidades.

