GINEBRA, Suiza (EFE). -El trabajo de las abejas aporta millones a la agricultura de un país, no tanto por la producción de miel cuanto por los efectos benéficos de la polinización.
Así lo señala en un informe el servicio suizo-alemán de información agrícola (LID), que lamenta que no se reconozca debidamente la contribución de la apicultura a la riqueza nacional. Esos beneficios los resaltó hace ya casi doscientos años el biólogo alemán Christian Conrad Sprenger, que llegó a pedir al Estado que se dotase de un ejército de abejas. Según el LID, un 90% de la polinización atribuida a los insectos se debe precisamente a las abejas. De acuerdo con ciertos estudios llevados a cabo en Alemania, por ejemplo, los agricultores cosecharían un 80% de manzanas menos y un 30%menos de colza sin esa contribución no remunerada. Por lo que respecta a un país tan pequeño como Suiza, se calcula que en 1996, la población apícola generó un valor de 300 millones de francos (unos 180 millones de dólares). Al fecundar las plantas salvajes, las abejas contribuyen a diversificar y enriquecer los alimentos a disposición de las aves y de otros animales.
