Estados Unidos (EU) enfrenta una abrumadora crisis azucarera después de que duras condiciones climáticas dañaran los cultivos, lo que obligó a un aumento de las importaciones.
Las fuertes lluvias, la nieve y el clima inusualmente frío afectaron los cultivos de caña y remolacha en estados clave este año.
El Departamento de Agricultura de EU (USDA, por sus siglas en inglés) recortó una vez más sus perspectivas para la producción estadounidense, prediciendo que la producción total caerá un 8% frente a la temporada pasada, a 8.28 millones de toneladas cortas (7.5 millones de toneladas métricas).
Debido a los problemas con la producción nacional, EU se verá obligado a importar más edulcorante y el USDA elevó sus perspectivas para las importaciones en un 22%. Sin embargo, la obtención de esos envíos no será tarea fácil, incluso luego de que el gobierno ya intervino una vez para garantizar los suministros adecuados.
La mayor parte del azúcar importado en EU proviene de México, que tiene prioridad para aumentar las compras en virtud de un acuerdo comercial bilateral. El problema es que México enfrenta sus propios problemas de cultivo tras una sequía que afectó las plantaciones.
Si EU tiene que comprar a otros proveedores mundiales, la medida podría implicar precios más altos. Al mismo tiempo, la industria azucarera de EU y sus clientes se extienden en una vasta área geográfica que podría generar problemas logísticos a medida que aumenta la necesidad de envíos.
Los desafíos logísticos de incorporar estas importaciones adicionales en el flujo de suministro industrial serán abrumadores, dijo el presidente de JSG Commodities, Frank Jenkins.
