El jefe del gobierno italiano, Giuseppe Conte, lanzó ayer una conferencia con dirigentes de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la reactivación económica en Italia tras la epidemia del coronavirus, ante el “impacto sin precedentes” que sufre su país.
“Estamos viviendo un impacto sin precedentes, con costes humanos, sociales y económicos muy altos. Comparto la misma idea que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen: no podemos permitirnos retornar al statu quo precedente a esta crisis”, declaró Conte.
“Debemos también aprovechar para transformar la crisis en oportunidad, y eliminar todos los obstáculos que han frenado (al país) durante los últimos veinte años”, agregó.
En esta reunión inaugurada por Conte, participan a distancia varias personalidades: además de Von der Leyen, Paolo Gentiloni, comisario europeo de Asuntos económicos, Charles Michel, presidente del Consejo Europeo y Kristalina Georgieva, directora del FMI.
Para Conte, los dirigentes europeos “deben demostrar que comprenden que se trata de defender intereses comunes”. Urgió además a “invertir en la belleza de Italia” como parte del programa de reactivación. Italia, azotada de lleno por la epidemia, prevé una caída de su PIB del 8.3% en 2020.

