Los 100 kilómetros (km) de caminos rurales que India añade cada día pueden proteger a la tercera economía más grande del Asia de lo peor de una recesión global.
Los nuevos caminos construidos hasta la fecha en virtud del programa de $27 mil millones han puesto los mercados urbanos al alcance de 60 millones de habitantes de aldeas en los últimos cinco años, permitiéndoles ganar dinero con la venta de frutas, verduras y leche que se hubieran echado a perder de otro modo.
Ahora están gastando su efectivo al tiempo que la economía mundial flaquea.
“La demanda rural está manteniendo en movimiento la economía”, dijo Shashanka Bhide, economista jefe del Consejo Nacional de Investigación Económica Aplicada, un grupo financiado privadamente con sede en Nueva Delhi.
Algunas de las mayores compañías de India ya se están beneficiando. Las acciones de Hindustan Unilever, el mayor fabricante de electrodomésticos, y Hero Honda Motors, el mayor fabricante de motos de India, están en alza este año mientras que el índice bursátil se ha desplomado 57%.
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