La Ley 179 del 16 de noviembre de 2020 “que regula el arrendamiento financiero de bienes inmuebles y dicta otras disposiciones”, mejor conocida como de leasing inmobiliario permitirá que además de viviendas también se pongan a la venta oficinas, locales comerciales y galeras.
El viceministro de Vivienda y Ordenamiento Territorial, José Batista dijo que originalmente el proyecto estaba dirigido solo a viviendas y apartamentos, pero luego se amplió a otros bienes inmobiliarios. Añadió que esta ley se dirige a los que no tienen el abono inicial para comprar una casa, pero también se convierte en una alternativa para los trabajadores informales que aumentaron de 40% a 55% debido a la pandemia.
El valor de los bienes inmobiliarios en venta se calcula en $7 mil millones. En cuanto a la oferta de casas y apartamentos actualmente en el mercado supera las 20 mil unidades, según el inventario más reciente que se hizo para la feria virtual Capac Expo Hábitat 2020, que se desarrolló entre el 15 y 26 de octubre pasado.
Esta legislación permite que el arrendador y el arrendatario celebren un contrato en virtud del cual el arrendatario financiero adquiere el derecho de uso y goce de un bien inmueble, mediante el pago de alquileres por un plazo definido, al término del cual podrá ejecutar una opción de compra.
Aunque la legislación establece algunos parámetros para el acuerdo entre las partes, le corresponde a la Superintendencia de Bancos de Panamá la competencia de regular y supervisar a las empresas autorizadas para ejercer el negocio de arrendamiento financiero de bienes inmuebles. Igualmente le corresponde a la Superintendencia de Bancos publicar una reglamentación de esta ley.
La norma exige la creación de entidades similares a las arrendadoras financieras, es decir, no lo pueden hacer directamente los bancos, aclaró el viceministro Batista.
