Este es el tiempo en el cual las marcas pueden demostrar su compromiso con la sociedad y el rol que pueden cumplir para contribuir al bienestar de las personas. Durante la pandemia que vivimos hemos podido ver el compromiso de muchas empresas con la sociedad, a pesar de las presiones financieras y de mercado que tienen actualmente o prevén en el futuro cercano.
Los sectores de banca, tecnología y educación han sido los primeros que han dado la cara para transmitirle a la población mayor tranquilidad y poner a su disposición herramientas que le permitan transitar de una mejor manera estas circunstancias que nos afectan a todos por igual. Desde los periodos de gracia en los compromisos financieros de las familias que así lo necesitan o la apertura gratuita de servicios de televisión por cable, internet, hasta la apertura al público de cursos de formación en línea gratuitos; entre otros; demuestran de qué están hechas muchas empresas y los empresarios que las dirigen.
Son cientos de historias que contar, desde empresarios independientes, pymes hasta grandes corporaciones globales que están contribuyendo a que las personas transiten estos momentos de la mejor manera posible y mitigar el temor, la angustia y la incertidumbre. El diálogo entre el sector privado y el gobierno, que también está llevando a cabo un excelente trabajo, es una muestra de que unidos se puede lograr mucho más y que no hay que estar en crisis para trabajar juntos con transparencia, con honestidad y sentido de humanidad para construir un mundo mejor.
La mayoría de los medios de comunicación han llevado a cabo una labor valiente y han contrarrestado con profesionalismo, ética y buen periodismo las intenciones de algunas personas de propagar noticias falsas.
En líneas generales, Panamá tiene que estar orgulloso como país, aplaudir la labor de un gobierno que se ha puesto sobre los hombros la tarea de trabajar sin descanso para superar esta crisis, inédita y muy compleja en todos sus sentidos. Celebrar la labor de nuestros profesionales de la salud que están atendiendo día a día a la ciudadanía, de los líderes gremiales que trabajan con el gobierno para aportar soluciones, los colaboradores de las empresas que han dado la milla extra y asumido el compromiso de asegurar la continuidad de los negocios desde múltiples formas, una de ellas el teletrabajo que nos ha enseñado una nueva forma de ser productivos, el esfuerzo diario de las personas que viven del día a día y que a pesar de sus circunstancias salen a la calle a buscar su sustento, se cuidan y cuidan a los otros.
En fin, el coronavirus es un tragedia para todos, pero también una ventana para darnos cuenta que el mundo es mucho mejor de lo que creemos y que después de esto va a emerger una mejor sociedad. Por eso, ya no preguntes más por quién doblan las campanas, doblan por ti.
El autor es consultor en comunicación estratégica.
