Los registros de la época dan cuenta de que Ward ultimó a dos prostitutas, Dalila Gaytán Troya, de 22 años de edad, y Rosa María Gómez, en el push button Los Espejos, situado en la vía Transísmica.
El primero de los homicidios ocurrió la madrugada del 8 de junio. El cadáver de la víctima fue hallado en un matorral cercano al camino que conduce al Templo Baha'i, en la misma carretera Transísmica; mientras que el segundo se registró el 19 de junio. En esa ocasión, el cuerpo fue localizado en una zona boscosa situada en la carretera Madden que conducía a Chilibre, en la antigua Zona del Canal.
Ambas víctimas fueron halladas desnudas, con traumatismos en el rostro, evidentes signos de estrangulamiento y prendas de vestir alrededor del cuello. La primera con un suéter y la segunda, un fajón.
Al concluir las pesquisas, la policía descubrió que Ward había matado a ambas prostitutas luego de contratar sus servicios y fracasar en el acto sexual debido a problemas de erección. "Cuando cojo rabia soy cosa seria", declaró en una ocasión el homicida.
Antes de los dos crímenes, en 1959, cuando apenas tenía 18 años de edad, Ward ultimó con un cuchillo a una mujer, luego de sorprenderla desnuda en el interior de su residencia, en San Francisco, donde pretendía irrumpir para hurtar algunos objetos. Al parecer, la víctima lo vio desde la ventana y esa fue razón suficiente para matarla.
Por este crimen, pagó 10 años en la isla penal de Coiba. Por los otros, fue sentenciado a purgar 20 años en la misma colonia penal en el Pacífico panameño.
Punto interesante en la trayectoria criminal de Silvano Ward Brown fue que luego de su primer homicidio y tras ser evaluado por el psiquiatra forense José Kaled, este recomendó que no se le devolviera a la sociedad, porque podría volver a matar.
Sin embargo, al cumplir su castigo y retornar a la sociedad volvió a matar a dos mujeres, lo que corroboró la tesis psiquiátrica de Kaled, que definía a Ward como un psicópata consumado.
Ward pagó sus condenas y fue sometido a rehabilitación psiquiátrica. Actualmente se encuentra en libertad. Hoy en día tiene 63 años de edad y reside en la ciudad capital junto con sus familiares.







