Las inmediaciones del consulado de Estados Unidos, el edificio del Poder Judicial de la Federación y un penal de la norteña ciudad de Monterrey fueron atacados en las últimas horas con granadas, con el resultado de un herido grave, informaron el sábado fuentes oficiales.
En cada uno de los casos, desconocidos lanzaron una granada de fragmentación, en una acción que corresponde a la forma de actuar de la delincuencia organizada.
Un guardia de seguridad resultó herido de gravedad por las esquirlas levantadas por el explosivo que impactó contra la rampa de estacionamiento subterráneo del edificio del Poder Judicial de la Federación, ubicado en un céntrico cruce de avenidas de la urbe. El ataque, sucedido a última hora del viernes, provocó que una veintena de trabajadores que se hallaban en el inmueble fueran evacuados.
La segunda explosión tuvo lugar a pocos metros, sobre la carretera, a menos de 200 metros del Consulado de los EU, ubicado también en el centro de Monterrey. El artefacto fue lanzado desde un auto en marcha.
Finalmente, una granada lanzada contra el penal Topo Chico dejó daños en dos vehículos.
El estado de Nuevo León registra desde marzo una intensa ola de violencia debido a la pugna entre dos carteles del narcotráfico —el del Golfo y el de Los Zetas—, que se salda ya con medio millar de muertos.
