La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, viajó ayer a Estados Unidos para reunirse mañana con su par Barack Obama, en su primera visita oficial a ese país en su segundo mandato y con una agenda que incluye cuestiones comerciales, de educación y energía.
Esta será la segunda cita de Bachelet con Obama, con el que ya se reunió en 2009 en su primer mandato, y su tercera visita oficial desde que asumiera el pasado 11 de marzo.
La presidenta irá acompañada del canciller chileno, Heraldo Muñoz, además del ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, el de Hacienda, Alberto Arenas, y el de Energía, Máximo Pacheco, así como representantes empresariales.
“La visita subrayará nuestra cercana relación con Chile y nuestra fuerte alianza con el gobierno de Bachelet para impulsar la paz y la seguridad globales, la inclusión social y el libre comercio”, indicó en un comunicado el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, cuando informó de la visita en mayo pasado.
La agenda estará centrada, según avanzaron ambas partes, en la revisión de tratados comerciales, educativos, científicos, tecnológicos y energéticos.
También estará en la mesa el papel de Chile como nuevo miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Los lazos comerciales entre ambos países son profundos. Estados Unidos es el mayor inversionista extranjero del país y uno de sus socios comerciales más importantes.
El tratado de libre comercio entre ambos países ha sido uno de los más exitosos de la historia, con un incremento del comercio de 249% en 10 años, según explicó el canciller Muñoz.
Sin embargo, una de las cuestiones más espinosas de la visita estará centrada en las negociaciones del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TTP).
