ÉXODO. Miles de civiles continuaban ayer abandonando la zona de conflicto en Sri Lanka, mientras soldados y rebeldes tamiles combatían en el que parece ser el final de la guerra más antigua de Asia.
En el tercer día desde que los soldados derribaron el muro de tierra construido por los Tigres por la Liberación del Elam Tamil (TLET) y desataron el éxodo, el Ejército dijo que al menos 100 mil personas habían sido registradas en tránsito hacia campos de refugiados.
