Al menos cinco personas murieron y otras 16 resultaron heridas por la explosión de un coche bomba que las FARC estacionaron ayer frente a un pequeño cuartel policial de la ciudad de Cali (suroeste), como parte de una ofensiva que realizan en los días previos a la posesión del presidente colombiano, Álvaro Uribe.
El comandante de la Policía Metropolitana de Cali, general Luis Meza, confirmó que en la explosión murieron cuatro uniformados y el conductor del coche bomba que fue detonado en un marginal barrio de esa ciudad.
"Un automóvil pequeño con 40 kilos de explosivos pasó por la estación de policía y estalló dejando cuatro policías muertos, otro cuatro heridos y la persona que conducía el auto también murió despedazada", señaló el oficial. La onda explosiva destruyó varias edificaciones en el distrito.

