SAN JOSE, Costa Rica (Servicios internacionales). El dirigente sindical venezolano Carlos Ortega, quien llegó exiliado la tarde del jueves a Costa Rica, afirmó este viernes que el gobierno del presidente Hugo Chávez es el más corrupto de la historia democrática de su país, y aseguró que quien manda en Venezuela es el presidente cubano Fidel Castro.
Lo que existe es un proyecto político que él (Chávez) ha calificado de revolucionario, pero lo que hay en realidad es un proyecto robo-lucionario, manifestó Ortega en una conferencia de prensa que brindó en la casa del ex presidente costarricense Luis Alberto Monge, quien le brindó hospedaje.
Chávez es el gran cómplice y encubridor de la corrupción en el país y el responsable del paro de 63 días con el que la oposición intentó derrocar al Gobierno entre diciembre y febrero pasados, aseguró el dirigente sindical.
Ortega, de 56 años de edad, y presidente de la principal central obrera CTV, llegó la tarde del jueves a San José acompañado por el embajador costarricense en Caracas, Ricardo Lizano, tras recibir un salvoconducto del Gobierno venezolano para viajar a Costa Rica.
Poco después de su arribo a la capital costarricense, el sindicalista dijo que esperaba pasar un corto exilio en este país centroamericano, pues tiene que cumplir una serie de compromisos en Estados Unidos, Bélgica y otros países.
Hospedado en casa del expresidente socialdemócrata Luis Alberto Monge (1982-1986), Ortega lanzó fuertes críticas al gobierno de Chávez, quien afirmó que no es quien manda en Venezuela, sino (el presidente cubano), Fidel Castro. Ortega afirmó que frente a la situación del paro convocado por la oposición la sana lógica de un gobernante demócrata era llamar al diálogo y la concertación... para ver cómo le buscábamos una salida, una solución a la crisis. Pero eso no ocurrió, ¿dónde está entonces el sentimiento patriótico del señor Chávez?"
Ortega aseguró ayer que Chávez pretendía liquidarme físicamente, lo cual le obligó a abandonar el país.
Había directrices muy precisas, muy concretas, de Chávez, para liquidarme, no desde el punto de vista político ni sindical, sino físico, añadió Ortega.

