La justicia castrense de México ordenó detener a 19 militares para juzgarlos por su presunta responsabilidad en el crimen de tres niños y dos mujeres que murieron a balazos en un retén del Ejército durante una ofensiva antidrogas, dijeron ayer lunes las autoridades.
Un juez militar del norteño estado de Sinaloa dictó auto de formal prisión, como se conoce a la detención para enfrentar un juicio, a un capitán, dos tenientes, dos sargentos, seis cabos y ocho soldados. A todos se les imputa como probables responsables del delito de "violencia contra las personas" y homicidio, dijo la Secretaría de la Defensa Nacional en un comunicado. "Con motivo de lo anterior se continuará con la instrucción del proceso penal militar en contra del citado personal", agregó.
Familiares de las víctimas habían denunciado que las cinco personas fallecidas, entre ellas tres niños de siete, cuatro y dos años de edad, fueron acribillados por soldados la noche del 1 de junio en las inmediaciones del poblado La Joya, en Sinaloa, debido a que no se detuvieron en el control militar. Tres días después del incidente, en el que también resultaron al menos tres personas lesionadas de acuerdo a medios locales, los militares fueron arrestados y llevados a una prisión del Ejército en el cercano puerto de Mazatlán.
El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, José Luis Soberanes, dijo hace una semana que estaba investigando la muerte de las cinco personas en Sinaloa y que visitadores del organismo se habían trasladado al lugar del incidente.
La Comisión de Derechos Humanos de Sinaloa dijo la semana pasada que al parecer todos los pasajeros del vehículo baleado iban desarmados.
Miles de soldados y policías federales participan en la mayor ofensiva antidrogas de los últimos años en México, lanzada por el presidente Felipe Calderón en diciembre para detener la violencia entre bandas rivales, que ha dejado unos mil muertos este año.
Pero la acción del Ejército está bajo la lupa luego de un reciente informe del defensor del pueblo que acusó a militares que participan en los operativos contra las drogas de varios abusos.