1504893
RELEVO. El Parlamento irlandés fue disuelto ayer de cara a los comicios del 25 de febrero, y el primer ministro Brian Cowen abandonó la vida política defendiendo su gestión, pese a haber llevado al país al borde de la bancarrota.
Cowen declaró el fin oficial de su gobierno dos meses después de verse obligado a negociar un préstamo de 67 mil 500 millones de euros (92 mil millones de dólares) con la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, medida que insistió en repetidas ocasiones no necesitaba Irlanda. Cowen dijo que sus dos años y medio de gobierno han sido una “dura prueba”.