ALEXANDRIA, Virginia (AP). Un experto en armas biológicas investigado por los ataques de ántrax el año pasado negó estar involucrado en el envío de cartas contaminadas y afirmó el domingo que las terribles acciones de terrorismo biológico le horrorizaban.
Soy un estadounidense leal y quiero a mi país, manifestó el doctor Steven J. Hatfill. No tengo nada que ver con las cartas de ántrax y es un terrible error que alguien me diga o piense lo contrario.
Las autoridades dijeron que Hatfill, de 48 años, es uno de los 30 científicos incluidos en la investigación sobre los casos de ántrax. El caso sigue sin ser aclarado, 10 meses después que cartas contaminadas causaron la muerte a cinco personas, enfermaron a más de una docena y provocaron el nerviosismo de muchas personas a abrir su correspondencia.
Después de una de las más intensas investigaciones públicas y privadas en la historia estadounidense, nadie ha presentado la más mínima evidencia de que yo tenga algo que hacer con las cartas de antráx, manifestó Hatfill en una declaración frente a la oficina de su abogado.
Las autoridades judiciales dijeron que Hatfill no es sospechoso y no hay evidencia que lo evidencia que lo vincule con las cartas de antráx en el otoño pasado. Lo han descrito como una persona de interés en su investigación. Muchos científicos en actividad y jubilados que hayan tenido acceso y conocimiento sobre ántrax han sido sometidos a detectores de mentiras. Hatfill es el único nombre que se ha mencionado públicamente.
Hatfill dice que dos investigadores del FBI le pidieron el año pasado una entrevista breve y cordial en su oficina, y si podía tomar una prueba con el detector de mentiras, similar a la que se les había tomado a otros.
