El general en retiro peruano Rodolfo Robles acusó ayer al ex presidente Alberto Fujimori de haber estado al mando del grupo Colina, grupo militar clandestino que operó durante su gobierno (1990-2000) y que cometió, entre otros delitos, las dos masacres por las que ahora se procesa al ex mandatario.
"El Colina actuaba bajo dos líneas de mando: la Presidencia de la República y el SIN (Servicio de Inteligencia Nacional), que eran las dos caras de la misma moneda", afirmó Robles durante la sesión 57 del juicio contra Fujimori.
El general, quien cuando estaba activo denunció en la década pasada la existencia del grupo clandestino, explicó detalladamente en el juicio la forma cómo, según él, el entonces mandatario y su asesor Vladimiro Montesinos, jefe de hecho del SIN, maniobraron para que esta última organización cobrara autonomía de las Fuerzas Armadas y pasara a depender directamente de la Presidencia.
"(La inteligencia operativa) comienza en julio de 1990 (con el gobierno de Fujimori). Pude detectar que estaban haciendo inteligencia operativa cuando vengo a conocer los crímenes que cometió el grupo Colina, que dependía del SIN. Perfectamente encaja acá, en las herramientas y estructura que necesitó para realizar operaciones especiales de inteligencia", agregó Robles.
Asimismo, el oficial confirmó la existencia de un "Manual de Guerra No Convencional" de carácter reservado, en el que el término "eliminar" significaba darles muerte extrajudicialmente a los subversivos, y "destruir" implicaba hacer el mayor daño posible.
A pesar de la dureza del testimonio de Robles, uno de los más directos contra Fujimori que se han escuchado en el proceso, el acusado pareció escucharlo con desdén e incluso en algún momento volvió a quedarse dormido.
Robles era uno de los principales mandos del Ejército cuando denunció que dentro de esa institución había una organización que cometía asesinatos y desapariciones y que respondía a un esquema encabezado por Fujimori y Montesinos. El gobierno y los militares negaron los cargos, pero investigaciones posteriores determinaron plenamente que el "Colina" sí existió y perpetró numerosos crímenes.

