LONDRES, Inglaterra (REUTERS). El Gobierno británico aumentó ayer miércoles la presión sobre el Ejército Republicano Irlandés (IRA), al advertir que una tregua por sí sola no es suficiente para cimentar la paz en Irlanda del Norte.
Un día antes de una esperada visita del primer ministro Tony Blair a la provincia -viaje que su oficina declinó confirmar-, el secretario británico para Irlanda del Norte, John Reid, dijo que la suspensión de la violencia por parte del IRA fue un elemento importante en el Acuerdo del Viernes Santo de 1998, orientado a poner fin a 30 años de violencia.
Sin embargo (...) el hecho concreto es que cuatro años después del Acuerdo de Belfast, una tregua no es suficiente, dijo Reid al parlamento. En un sentido, todos necesitamos tener verdaderamente la sensación de que la guerra ha terminado, añadió.
El IRA ha mantenido una tregua por la mayor parte de los últimos siete años, tras una sangrienta campaña por la unidad irlandesa que costó más de 3 mil 600 vidas.
Pero ha pasado de una controversia a otra en las últimas semanas.
La semana pasada, una comisión del Congreso de Estados Unidos que investiga los presuntos vínculos entre el IRA y los rebeldes izquierdistas colombianos, dijo que aproximadamente 15 de sus miembros visitaron Colombia y que se cree que los paramilitares irlandeses forman parte de una red terrorista global.
La policía de Irlanda del Norte también sospecha que el IRA estuvo detrás del grupo que entró el mes pasado en una unidad antiterrorista de alta seguridad en Belfast para robar expedientes delicados.
Y previamente este mes, la policía recuperó una lista recién actualizada de políticos británicos que podrían ser blanco de ataques del IRA.
En ese contexto, y en esta época, después de cuatro años, ésa es precisamente la razón por la que simplemente no es aceptable que ni el aparato de violencia, ni el terrorismo o los preparativos (para realizar actos terroristas) puedan continuar, dijo Reid.
El aliado político del IRA, el partido Sinn Fein, que lucha por ganar nuevos escaños en las elecciones de este mes, ha negado las acusaciones. Por su parte, el líder protestante moderado David Trimble, primer ministro de Irlanda del Norte, dijo que Reid fue excesivamente comedido.
