Los trabajadores que realizan mejoras en el puente de la bahía de San Francisco descubrieron una “grieta significativa” en el arco este, lo que podría suponer que esa construcción se mantenga cerrada más días de los planeados inicialmente.
El puente de 73 años fue cerrado el jueves por la noche, para que el arco este pudiera ser cortado y reemplazado con una sección nueva de dos plantas que conectará el puente con un desvío corto.
El viernes fue la primera vez que el puente fue cerrado durante un día laboral desde que parte de la estructura se desplomara por un terremoto en 1989.
Durante una inspección el pasado sábado, los trabajadores descubrieron un problema con un conector de acero que ayuda a aguantar la porción este del puente, dijo el ingeniero Ken Brown al diario San Francisco Chronicle.
El conector –parte de un conjunto de ocho piezas similares– tiene unos cinco centímetros (dos pulgadas) de grosor. La fisura lo atraviesa por en medio.
“La fisura es suficientemente significativa como para cerrar el puente”, explicó Bart Ney, portavoz del departamento de Transporte de California, durante una rueda de prensa el sábado por la noche.
“Tenemos que reparar esto antes de reabrir el puente”.
Ney añadió que “es muy posible que esto no nos permita abrir el puente el martes por la mañana” , cuando se reanuda la semana laboral tras un fin de semana largo de vacaciones para los estadounidenses, que el lunes celebran el Día del Trabajo.
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