El portavoz del Vaticano, el jesuita Federico Lombardi, indicó este lunes a las víctimas de abusos sexuales por parte de religiosos católicos que tienen que “contemplar a la Iglesia cada vez más como un posible aliado”, en una carta personal que les ha dirigido.
Unas 50 víctimas de abusos sexuales de sacerdotes de la Iglesia católica procedentes de varias partes del mundo se reunieron este domingo en Roma y rechazaron con gritos la presencia de Lombardi, quien se acercó para expresar su solidaridad.
En su misiva, Lombardi les tiende la mano y propone una alianza para combatir la vergüenza y el drama de los abusos a menores. “La plaga de los abusos sexuales es una de las grandes plagas del mundo actual” y “lo que ocurre dentro de la Iglesia constituye sólo una pequeña parte de lo que ha ocurrido y sigue ocurriendo en el mundo entero”, señala.
Arguye que “la Iglesia debe ser la primera en liberarse de esta plaga”, que “aumenta más fácilmente cuando está escondida”.
Lombardi añade que la investigación y la intervención por parte del Vaticano deben ser más rápidas.

