Miles de personas expresaron ayer su rechazo a la decisión del Gobierno nipón de reactivar las centrales nucleares del país, mayoritariamente rechazada, en una manifestación convocada frente al Parlamento a pocos días del cuarto aniversario del desastre de Fukushima.
La concentración, coordinada por la plataforma civil Coalition Against Nukes (Coalición Antinuclear, en inglés), comenzó al mediodía de ayer en un parque ubicado en el corazón administrativo de la capital nipona, y terminó con una cadena humana que rodeó parte de la Dieta (Parlamento) de Japón.
Varios miles de personas, según los organizadores, participaron en la marcha en medio de un ambiente festivo animado por conciertos y bandas itinerantes, y ante el amplio dispositivo policial desplegado por las autoridades alrededor del edificio de la Dieta.
(Adiós nuclear), “No queremos otro Fukushima” o “Sí a un Japón libre de energía nuclear” fueron los lemas más habituales en esta protesta contra la iniciativa del Ejecutivo nipón de reactivar las centrales atómicas que permanecen apagadas desde el accidente nuclear de Fukushima.
Algunos manifestantes optaron por métodos más imaginativos para hacerse notar como disfraces de peces, bicicletas equipadas con banderas y carteles, molinillos de viento o cañas de pescar con capturas ficticias contaminadas.
