El médico que hace un año ayudó a una mujer californiana a dar a luz a octillizos podría perder su licencia, pues el comité estatal de Salud lo acusa de negligencia grave, informó este martes el diario Los Angeles Times.
Michael Kamrava no comprobó el estado psicológico de su paciente, Nadya Suleman, y además le implantó un número demasiado elevado e innecesario de embriones.
Según publica el rotativo, las acusaciones contra el médico, que tiene una clínica de tratamientos de fertilidad en Beverly Hills, fueron presentadas en diciembre. Suleman se sometió a tratamiento durante 11 años en la clínica de Kavram. En este tiempo dio a luz a 14 niños por inseminación artificial, entre ellos octillizos en enero de 2009.
Cuando se quedó embarazada, en julio de 2008, estaba soltera, sin trabajo y ya era madre de otros seis pequeños. El polémico embarazo por inseminación artificial “traspasó todos los límites razonables para un médico”, señalan autoridades sanitarias. De confirmarse las acusaciones, Kavram podría perder su licencia. Su abogado, Peter Osinoff, sostiene que el médico sólo trató de hacer realidad los deseos de la paciente.