El Juzgado Primero de Ejecución Penal de Guatemala negó este lunes la solicitud de libertad anticipada para el sacerdote Mario Orantes, quien cumple 20 años de prisión por su participación en el asesinato, en 1998, del obispo Juan Gerardi.
Según el juez José Luis Patzán, Orantes deberá estar en prisión al menos otros tres años al no cumplir los requisitos para recuperar su libertad mediante la Ley de Redención de Penas, que permite a los condenados salir de prisión tras cumplir la mitad de su condena.
Orantes fue encontrado culpable como cómplice en el delito de ejecución extrajudicial del obispo auxiliar de Guatemala y condenado en julio de 1999.
Gerardi fue asesinado de un golpe en la cabeza el 26 de abril de 1998 en la cochera de la casa parroquial de la iglesia San Sebastián, a unos 300 metros de la casa Presidencial de Guatemala.
El crimen se cometió 54 horas después de que el obispo presentara su informe sobre la Recuperación de la Memoria Histórica (Remhi), Guatemala Nunca Más.
