El líder laborista noruego Jens Stoltenberg, cuya alianza rojiverde derrotó al gobierno de centroderecha en las elecciones parlamentarias, prometió ayer martes invertir más ganancias del petróleo en servicios de seguridad social.
"Usaremos las grandiosas oportunidades y los ingresos de Noruega para el bien común (...) trabajo para todos, buenas escuelas, seguridad y cuidados para los mayores", dijo a periodistas Stoltenberg, de 46 años, tras la victoria del lunes.
EL PERDEDOR
Stoltenberg y su alianza vencieron al gobierno del primer ministro Kjell Magne Bondevik, pese al bienestar económico que vive el país y a encuestas de las Naciones Unidas que cada año señalan a Noruega como el mejor lugar para vivir desde el 2001.
Stoltenberg, economista y ex primer ministro noruego entre el 2000 y el 2001, dijo que la reducción de impuestos implementada por Bondevik traicionó la tradición nórdica de igualdad.
El laborismo, que domina la política noruega desde mediados de la década de 1930, acusa a Bondevik de dar a los ricos una excesiva porción de las ganancias del tercer mayor exportador de petróleo del mundo, en la forma de recortes de impuestos.
LA AGENDA DE STOLTENBERG
Stoltenberg recibió en el parlamento a los líderes de los aliados partidos Socialista de Izquierda y Centro para establecer el cronograma a seguir en las conversaciones para una plataforma conjunta.
"Hay desacuerdos y será difícil", dijo Stoltenberg, agregando que un punto central de discusión será el de si se permite o no la exploración de petróleo y gas en el mar de Barents.
El laborismo está a favor, pero los otros dos partidos de la alianza temen que un derrame dañe el frágil medio ambiente.
A diferencia de la mayor parte de otras naciones, Noruega no tiene problemas en elevar sus gastos para cumplir con las promesas hechas en campañas electorales debido a que tiene efectivo en exceso gracias a ser el mayor exportador mundial de petróleo después de Arabia Saudita y Rusia.
Bondevik, un sacerdote luterano de 58 años, renunciará tras presentar un presupuesto para el 2006 el 14 de octubre. Visitó al rey Harald ayer para notificarle formalmente su derrota al jefe de Estado. Con el 99.2% de los votos contabilizados, la alianza rojiverde obtuvo 87 asientos en el parlamento de 169 escaños.
