Los huracanes "Dennis", "Emily" y "Franklin" inauguraron la temporada 2005 en el Atlántico, que se inició oficialmente el pasado 1 de julio. De acuerdo con los pronósticos meteorológicos, este año se desarrollarán 13 tormentas tropicales, de las cuales siete podrían convertirse enhuracanes.
A su paso, "Dennis" mató a 70 personas en Haití, Cuba y Estados Unidos, además de causar cuantiosas pérdidas materiales, mientras que "Emily" dejó nueve muertos.
Panamá, por estar en una latitud entre los 0.5 y 0.8 grados, y por la fuerza de coriolis (un efecto que resulta de los giros de la Tierra), es uno de los pocos países del área que no es afectado por estos fenómenos naturales que cada año se cobran cientos de vidas humanas y causan daños materiales.
Así lo informó Aneth Queen, meteoróloga del Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC), quien recalcó que la naturaleza es impredecible, por lo que no puede asegurar que Panamá nunca será afectado por un huracán.
CARACTERÍSTICAS
Los ciclones, como también se le conoce a los huracanes, se forman en los trópicos, cerca de la línea ecuatorial.
La fuerza de coriolis hace que el huracán gire, de la misma manera que el agua empieza a girar cuando va cayendo por un desagüe, explicó Queen.
"Para que un huracán se forme debe existir un grado de latitud de 10 hacia arriba. El ciclón debe originarse sobre aguas oceánicas que tengan por lo menos 26.5 grados centígrados", dijo Queen.
Los huracanes necesitan gran cantidad de energía y la toman del océano. El agua y el aire caliente cerca de la superficie ayudan a que se formen los huracanes. Una vez que se han formado, los huracanes toman energía del agua para hacerse más fuertes. Si llega a tierra, comenzará a debilitarse y, eventualmente, a desaparecer. Esta es la razón por la cual las áreas de la costa son las más afectadas por los huracanes.
La principal razón que favorece a Panamá para que un fenómeno de esta naturaleza no lo afecte es porque el ciclón no se formará a menos de aproximadamente 500 kilómetros del ecuador debido a que la fuerza de coriolis es demasiado débil. Es esta la fuerza que inicialmente hace que el ciclón gire en espiral y que mantiene la baja presión de la perturbación.
Queen añadió que, aunque los huracanes no afectan a Panamá directamente, en algunos casos se presentan efectos colaterales del fenómeno natural en el país, como las fuertes lluvias.
Hay tres tipos de ciclones tropicales: la depresión tropical, la tormenta tropical y el huracán.
La primera es un sistema organizado de nubes y tronadas con una circulación bien definida y vientos sostenidos máximos de 37 a 62 kilómetros por hora (20 a 33 nudos); la segunda es un sistema organizado de fuertes tronadas con una circulación bien definida y vientos sostenidos máximos de 63 a 117 kilómetros por hora (34 a 63 nudos). Es en este punto es que se nombra la tormenta.
El huracán es un intenso sistema climático tropical con una circulación bien definida y vientos sostenidos máximos de 118 kilómetros por hora (64 nudos) o más.
LOS NOMBRES
Los pronosticadores empezaron a dar nombres a los huracanes y a las tormentas tropicales para permitir la facilidad de comunicación entre ellos y con el público en general en cuanto a los pronósticos, avisos y alertas.
Antes de 1950, a los huracanes se les asignaban nombres por el año en que se presentaban más una letra del alfabeto (por ejemplo, 1942 A, 1942 B, etc.). Entonces se convirtió en una costumbre llamar los huracanes con nombres de personas.
Aneth Queen señaló que al principio solamente se les asignaban nombres de mujeres, pero desde 1978 se usaron alternativamente nombres de mujeres y de hombres.
La experiencia ha demostrada que los nombres son más cortos, más rápidos y causan menos errores, tanto en la comunicación escrita como en la oral, que cualquier otra identificación de huracanes usada hasta la fecha.
Agrega la meteoróloga que cada año se prepara una lista potencial de nombres para la próxima temporada ciclónica. La lista contiene un nombre para cada letra del alfabeto.
Estas listas son recicladas cada seis años y se reemplazan los nombres cuando se ha retirado un nombre de huracán.
Se retiran los nombres de huracanes (esto es, no se usan otra vez para una nueva tormenta) si se considera que es notable debido al daño y/o muertes que causó. Al retirar el nombre de una tormenta notable, se evita confundir una tormenta bien conocida históricamente con una actual.
ORIGEN
El término huracán fue utilizado hace mucho tiempo por los indígenas. Los mayas llamaban al dios de las tormentas Hunraken. Para los taínos del Caribe el dios del mal se llamaba Juracán. En el presente no se considera que los huracanes sean enviados por dioses malignos, sino que son fenómenos naturales con gran energía.
Es por medio de éstos que la naturaleza mantiene el balance de calor entre el trópico y los polos, además de llevar lluvias a las regiones áridas.
