El papa Benedicto XVI lavó y secó los pies de 12 hombres en la ceremonia tradicional del Jueves Santo que conmemora el gesto de humildad de Cristo hacia sus apóstoles.
El Papa de 81 años nacido en Alemania, acercándose a la cuarta Pascua de Resurrección de su pontificado, llamó a evitar la tentación de las posesiones materiales y las “vanidades”.
Durante el oficio religioso, virtió agua sobre los pies derechos de 12 hombres sentados en plataformas y los secó.
El ritual fue realizado en la Basílica de San Juan de Letrán en Roma, la catedral del Papa en su calidad de obispo de la capital italiana. Previamente, el Papa dijo en una ceremonia en la Basílica de San Pedro de Roma que los católicos deben recibir la eterna verdad de Dios en lugar de ser influenciados por las “opiniones reinantes” y por la superficialidad.
“Pidamos al Señor que custodie nuestros ojos para que rechacen y no dejen entrar en nosotros las vanidades, la vanidad y la nulidad, es decir lo que solo es apariencia. Pidamos que a través de nuestros ojos no entre en nuestro cuerpo el mal, falsificando y ensuciando nuestro ser”, afirmó Benedicto XVI.
El Obispo de Roma exhortó a los cristianos a “gestos de hospitalidad” con el extranjero, a acogerlo en su familia y hacerlo partícipe de su vida.
Sobre la eucaristía, el Papa dijo que no puede ser solo una acción litúrgica y que solo está completa si el “ágape litúrgico se convierte en amor cotidiano”.
Benedicto XVI abogó para que viviendo cada vez mejor el misterio de la eucaristía se transforme el mundo.
Hoy, Viernes Santo, el Papa celebra dos ceremonias para conmemorar la crucifixión de Cristo, incluyendo una procesión Vía Crucis (Camino de la Cruz) alrededor de las ruinas del Coliseo romano.
El Sumo Pontífice durante una misa de la víspera de Pascua de Resurrección el sábado en la noche y el domingo dará una bendición y mensaje Urbi et Orbi (a la ciudad y al mundo).
La ocupada agenda del Papa durante la Pascua transcurre en momentos en que gran parte de la atención de Italia está centrada en un terremoto que causó la muerte a más de 280 personas a apenas 100 kilómetros a las afueras de Roma.
El Papa ha dicho que visitará el área pronto y el secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, presidirá un funeral para las víctimas hoy viernes.

