MOSCU, Rusia (AP). -El presidente ruso Vladimir Putin destacó el domingo que urgen medidas políticas para resolver el conflicto en Chechenia, pero descartó cualquier negociación con los rebeldes.
Putin se reunió con un grupo de chechenos que apoyan a Moscú en el Kremlin, en respuesta a su exhorto a acelerar los procesos políticos para poner fin a la guerra iniciada hace tres años. Los chechenos, entre ellos el representante de la república en el parlamento ruso y empresarios, señalaron que se debe realizar un referendo político en la república, seguido de elecciones.
Apenas recientemente, yo pensaba que no valía la pena apurar esto. Pero si ustedes creen que es el momento de activar estos procesos, estoy de acuerdo con ustedes'', dijo.
Las constituciones de las repúblicas rusas señalan la división de poderes entre los gobiernos locales y el de Moscú, así como la estructura de la administración regional. Sin embargo, la Constitución rusa es la ley máxima del país.
El gobernante checheno designado por el Kremlin, Akhmad Kadyrov, dijo tras el encuentro que un referendo constitucional será realizado en marzo o abril y las elecciones poco tiempo después. Al preguntársele si se le permitiría a los rebeldes separatistas participar en los comicios, dijo que los terroristas no podían hacerlo.
Putin reiteró la posición del Kremlin de que no habrá conversaciones con el presidente rebelde checheno Aslan Masjadov u otros dirigentes separatistas. Hasta la crisis de rehenes del mes pasado en un teatro de Moscú, las autoridades rusas habían manifestado su disposición a negociar con Masjadov el desarme de los rebeldes. Sin embargo, el Kremlin ahora lo acusa de estar detrás del ataque al teatro, que terminó con la muerte de 128 personas.
Quienes optan por Masjadov optan por la guerra, dijo Putin. En lugar de conversaciones, él ha elegido el sendero del terror y apoyado a la basura que tomó a cientos de personas como rehenes, añadió.
Putin dijo que se llevaban a cabo acciones para aumentar las atribuciones de la policía chechena, lo que aseguró pondría fin a los abusos a los derechos humanos.
El dirigente espiritual musulmán de Chechena dijo a Putin que los abusos cometidos por las tropas rusas llevan a los jóvenes a ponerse en el bando de los rebeldes.
Las redadas vienen acompañadas de robos y desapariciones y hacen que la gente vuelva su mirada al bosque (a los rebeldes), dijo el mufti Akhmed Shamayev. La gente no seguirá a Masjadov si no violamos los derechos humanos'', agregó.
Desde marzo de 1999, en la guerra de Chechenia han muerto más de 4 mil soldados rusos, 14 mil rebeldes y varias decenas de miles de civiles.
Hasta ahora, el gobierno ruso apostaba por ganar primero la lucha militar contra los rebeldes y luego celebrar elecciones en Chechenia.
Según dijo Putin, ahora el gobierno comprendió que el proceso político no se puede retrasar. Como paso hacia la autoadministración en Chechenia, el ministro del Interior, Boris Gryslov, ordenó la creación de un Ministerio del Interior propio en Grozny.
