Autoridades y ambientalistas brasileños recordaron ayer lunes al asesinado defensor de la Amazonia, Chico Mendes, al conmemorarse el 20 aniversario de su muerte en Xapuri, en el extremo noroeste del país.
“Lo que Chico Mendes defendía no era solo el bosque por defender el bosque. Defendía una forma moderna de vida del pueblo que habita en el bosque, adecuando las riquezas producidas por la naturaleza”, comentó el presidente Luiz Inácio Lula da Silva en un programa radial.
Tras recordar que tuvo una relación política estrecha con Mendes, Lula comentó que “cuando él fue asesinado es que Brasil tomó conciencia de que tenía un líder muy importante y anónimo”.
Mendes, un sindicalista y ambientalista fue asesinado de un tiro en el pecho el 22 de diciembre de 1988, y su muerte lo convirtió en un símbolo de la lucha por la preservación del bosque húmedo más grande del mundo.
El hacendado Darly Alves da Silva y su hijo Darci fueron sentenciados por el asesinato del activista, quien luchó por impedirles deforestar la Amazonia para criar ganado. Ambos recuperaron su libertad después de completar un tercio de sus sentencias de 19 años de cárcel.

